The King of Fighters XIII

Un sonido de motor de un avión, rasgando las esponjosas nubes del cielo, interrumpió por
un momento la conversación que mantenían dos personas...
Benimaru Nikaido dejó una bolsa cerca de sus pies mientras su mirada seguía lentamente
el avión en la distancia... Enfrente de él estaba la imponente silueta de Duo Lon.

"Cuando se trata de este misterioso y elusivo hombre, curiosamente, le entiendo. Es un hombre que vive en un mundo aparte, diferente al mío".
Al menos es como Benimaru lo veía.
-"...¿¿Hospitalizado??"
Habiendo sido interrumpido por el sonido del motor, Duo Lon lo repitió.
-"¿Kyo Kusanagi está...?"
-"Es más como un examen médico... No puedo decir si es serio o no. Shingo sí fuegravemente herido cuando intentó parar a Yagami. Todos sus huesos fueron fracturados.Va a necesitar más de uno o dos meses para recuperarse."
Pero luego, se sintió agradecido por haber sobrevivido. Habiéndose encarado con IoriYagami después de que entrara en el "Riot of Blood" y habiendo sobrevivido era serrealmente afortunado.
Duo Lon puso sus manos en los largos bolsillos de su chaqueta, alejándose un poco de
Benimaru, y cerró lentamente los ojos suspirando.
-"¿...Así que vuelves a casa?"
-"Bueno sí, de momento... Él no es del tipo de personas que abandonan sólo por esto.
Esto quiere decir que ya debe estar buscando miembros para su equipo. Y no puedehaber mejor compañero de equipo que yo, verdad?"
-"Así que es eso?"
-"Claro que lo es."
Benimaru dio un movimiento de cabeza antes de decir abruptamente:
-"Aún vas detrás de ése hombre ¿no?
-"¿Qué quieres decir?"
-"No te hagas el despistado conmigo! No olvides que yo ya le encontré antes."
-"..Así es."

Duo Lon, miembro del clan de asesinos Hizoku, ha estado buscando sin descanso el que
traicionó su familia y los abandonó... Su propio padre, Ron.
Para alguien como él, que está normalmente siempre en las sombras, entrar varias veces en el mediatizado torneo de "The King of Fighters" es probablemente una manera deseguir la pista de Ron.
La brisa veraniega hacía doblar suavemente su pelo rubio, Benimaru añadió...
-"Si nunca me encuentro con ese hombre, dónde sea, te lo haré saber."
-"Te lo agradezco Nikaido, por ayudarme con mis problemas"
-"No tienes porqué darme las gracias!...Aunque podrías avisarme tú a mi si nunca ves a ése pequeño mocoso."

Duo Lon se paró durante un instante y miró fijamente a Benimaru...
-"¿Que tienes con Ash?"
-"Yo personalmente nada, pero él puede que sí...Después de todo, todos han sido
engañado por ése tal Ash, de una manera u otra ¿no?
-"Aún preocupándote por Kyo... Realmente eres todo un guardián!"
-"Corta el rollo!"
Una vez más Benimaru sonrió y miró su reloj, antes de saltar por encima la valla.
-"Bien, es la hora de embarcar"
-"Cuídate..."
Duo Lon lanzó estas pocas palabras mientras Benimaru se alejaba con su bolsa cargada al hombro. Unas palabras frías e indiferentes a pesar de estar viendo a su amigo partir.
Benimaru volvió su cabeza mirando por encima del hombro...

-"Después de todo, puede que no tardemos mucho en volver a vernos."
-"Pero esta vez no será como compañeros de equipo."
-"Exacto!"
Una vez más, un avión aterrizó cerca del lugar. El fuerte viento que provocó hizo volar las
largas cabelleras de los dos hombres. Y de nuevo su conversación fue interrumpida.
Benimaru, después de volver la cabeza por el fuerte viento, miró atrás hacía Duo Lon para despedirse de él una última vez pero la oscura alta y delgada silueta que estaba ahí hacíaun momento ya se había esfumado.
-"No cambiará nunca..."
Frotó ligeramente su pequeña nariz, cargó con su bolsa y se alejó...

¿Cuanto valor podía tener la tierra de éste barrio? No había manera de que un hombre sin experiencia en esto como Benimaru lo supiera... Pero incluso para él era obvio que no se trataba de algo barato.
Para instalarse en un hotel como ése, hubiera necesitado, no sólo una gran riqueza, sino
también poder y una buena posición.
Y parecía que los descendientes de la ancestral família Kagura tenían precisamente ese
poder y posición.
Benimaru estaba al lado del estanque del vasto jardín, mirando abstraído como un grupo de carpas nadaba grácilmente en la tranquila agua, cuando oyó un sonido de seda detrás y se volvió.
-"¿Cuando has vuelto a Japón?"
Era la voz de una preciosa dama japonesa de cabello negro vestida con una yukata
púrpura... Era la voz de Chizuru Kagura.
-"Hace sólo unas horas."
-"Siempre envidié tu ligero movimientos de pies."
Con una triste sonrisa Chizuru se sentó de forma pulcra y elegante sobre el tatami que
cubría la galería de cara al jardín.
Este había sido un año muy húmedo en Japón, pero el poco brillo que mostraba el rostrode Chizuru no era únicamente por el sofocante calor. Después de que se les sirviera unfrío Uchija, Benimaru esperó a estar a solas para preguntar a Chizuru sin rodeos.

-"No parece que hayas mejorado mucho, Chizuru."
-"Me he recuperé de mis heridas... Pero mi fuerza..."
-"Hmmm.."
-"De cualquier modo Nikaido, sentí mucho olvidarme de felicitarte por ganar el torneo."
-"¡Ni siquiera lo menciones! ¡¿Sabes lo frustrante que es que tu oponente desaparezca en
medio de la lucha?! No hay nada de lo que estar orgulloso."
Benimaru bajó del banco y mantuvo agitando lentamente su vaso. El frío té dejaba un
extraño sabor dulce a medida que bajaba por la garganta de Benimaru.
Por supuesto, tal y como se sentía estaba lejos de considerarse un triunfo. Y tras tan
humillante evento, Nikaido decidió regresar de inmediato a Japón.
La actual cabeza de la família Kagura: Chizuru Kagura, el sucesor de la família Kusanagi:
Kyo Kusanagi y el heredero de los Yagami: Iori Yagami...
Esos tres estarán siempre atados por una leyenda ancestral. La Leyenda de Orochi: la Tierra se protegerá a si mísma de la arrogante ambición del ser humano. Utilizando en esta eterna lucha para la supervivencia los que sellaron a Orochi: los descendientes de los tres tesoros sagrados...
Hace unos años atrás, cuando Orochi intentó revivir, estos tres personajes consiguieron sellarlo una vez más. Pero en los eventos del último torneo KOF, encontraron una nueva poderosa amenaza que podría compararse con Orochi mismo :"Los de la tierra lejana"....

En tiempos en que se acerca el verano, y en algunos otros lugares del mundo se
acercaba el otoño, en esos tiempos, el joven estaba viajando por el mundo.
Pero, ese viaje estaba a punto de finalizar.
En la calle se escucha Tango Argentino, el joven no había aprendido ni un solo paso de
Tango a pesar de llevar mas de un mes en este país (Argentina ).
Seguramente que Benimaru se reiría de el por ello, pero el, no había ido allí para
aprender bailes.
Mientras silbaba el tango al unisonó del que se escuchaba en la calle, el joven caminaba con las manos en los bolsillos de su chaqueta de cuero, la calle estaba ligeramente iluminada por unos ya viejos neones.
En ese mismo momento, el joven se dio repentinamente la vuelta, la mochila de hombro que llevaba se le cayó allí mismo. Apretó los puños ligeramente y se preparo para el peligro.
"Quien sois vosotros?"
Dijo el joven caminando lentamente hacia la oscuridad con voz baja...
De repente reparo en que de la mejilla le salía un hilo fino de sangre.
"Tu eres....Kusanagi....Kyo,no?"
De la oscuridad salieron dos chicos jóvenes, uno de ellos llevaba el pelo cortado como un champiñón, a su lado, una chica de pelo corto, los dos, tenían en la mirada una oscuridad incluso mas oscura que aquel lugar.
"Ese sensacional recuerdo por algún motivo..."
A la vez que miraba a los dos extraños chicos, el joven, Kusanagi Kyo, rápidamente limpio
el corte de su mejilla.
"Sois esos.....sois colegas de como se llamen? que demonios queréis de mi?"
"........"
Los chicos, sin responder a la pregunta de Kyo, jugaban con una especie de lazo que
tenían entre las manos.
Kyo fijo su vista entornando los parpados en ese "lazo".
Lo que ellos tenían en las manos, era un parche para el ojo de cuero negro.
Al verlo, Kyo no pudo evitar recordar a cierto militar que usaba uno como ese.
Si estos chicos han quitado el parche a quien estoy imaginando, deben tener una fuerza
fuera de lo común.


El cuerpo del chico no parecía el de un luchador, tras su polo podía verse un cuerpo
extremadamente delgado, no obstante, tenia como una agilidad que podía ser la clave
de su fuerza real.
"Ya veo, así que no sois unos simples ratones,....y, que demonios queréis de mi?
Si seguís callados, no tenéis nada que ver conmigo, dejadme pasar de inmediato"
"Solo eres palabrería"
El chico, se puso en su ojo izquierdo el parche, y con su mano izquierda cuyas uñas
eran bastante largas señalo a Kyo.
"....Y así es como nos conocemos por primera vez, ciertamente no eres lo que esperaba,
Kusanagi Kyo, como puede ser tan debil el poseedor de la "espada" "
Frente a un Kyo con un corte en la mejilla, el chico y la chica se miran y empiezan a reírse
en voz bajita. No obstante, aunque estaban humillándole, Kyo no mostro nada de enfado.
Al contrario, su boca esbozaba una ligera sonrisa.
"Habláis mucho, pero no os estáis pasando un poco?"
"Que diablos dices?"
"Aun no te has dado cuenta?"
Kyo señalo al chico, la parte del pecho de su polo estaba cambiando a cenizas y se caía a
pedazos.
"....!"
La expresión del chico cambio de golpe. Kyo no estaba suficientemente enfadado, de
estarlo, posiblemente el chico estaría ahora en el suelo ardiendo entre las llamas
de Kusanagi.
El chico pareció darse cuenta, y cambio el tono de voz.
"...Ciertamente nos equivocábamos contigo, pero al revés, eres mas poderoso de lo que
creíamos"
"Vaya, parece que te has dado cuenta"
Kyo movió su cuello.
"...Bien, ahora voy a por ti!"
"Un momento"
Justo parando el ataque de Kyo, el chico le lanzo una cosa blanca.
"...?"
Kyo lo recogió, era un sobre blanco con una estampa roja con la letra "R" tallada, todo le
resultaba familiar"
Kyo cambio su mirada de la carta a los chicos y les pregunto.
"...Por que tenéis vosotros esto?"

"Porque si huyes nos meteríamos en líos, queríamos asegurarnos de que la carta de
invitación te era entregada, pero parece ser que no tenias intención de huir"
El chico junto a la chica empezó a caminar hacia atrás metiéndose en la oscuridad.
"Te hemos entregado la carta, Kusanagi Kyo, quede claro. Es posible que se haya
entregado a gente familiar para ti, no nos decepciones"
"No es necesario que me lo digáis"

Kyo volvió a mirar la carta tras perder de vista a los chicos en la oscuridad. Sin aun haber
abierto el sobre, en su interior, imagina de lo que se trata.
Kyo guardo la carta en la mochila y sonrió.
"Bueno, mientras me permitan pelear con eso basta, yo solo quiero acabar con ese
cabrón"


Benimaru le pregunto a Kyo mientras ajustaba el espejo retrovisor de su coche en un
semáforo en rojo.
"Ahora que lo pienso, has ido a ver a Shingo al hospital?"
"Paso."
"Hace poco Yagami Iori visito a Chizuru,o eso he oído"
"Me interesa menos aun."
Kyo se recostó y bostezo. Hacia menos de una hora que acababa de reencontrarse con sus compañeros, y para lo bueno y para lo malo Kyo no había cambiado. Aun siendo mayor tenia facetas infantiles. Venia del extranjero de entrenar sus habilidades, así que podía decirse que lo único que realmente había cambiado era su fuerza.
Benimaru miro en el retrovisor a Goro Daimon que estaba en el asiento trasero y se rio
bajito.
"que pasa?"
Pregunto Kyo a Benimaru mirándole de reojo.
"El que?"
"Ahora, te has reído no?"
"Que va..."
"....hmmm"
Kyo reclino el asiento y miro fuera.
"Cambiando de tema, Daimon"
"Que?,Kyo"
"Es igual que dejes temporalmente tu trabajo?"
"Yo siempre soy el mejor Judoka, no necesitas preocuparte"
Benimaru arranco el coche silenciosamente,como dejando atras
la extrema seriedad de Daimon.
"Gorito, hasta que acabe el torneo dejas de dar clases no?"
"eh?, entonces no puedes perder, hazlo por tus alumnos"
"Por supuesto, no voy a perder. ......Vosotros vais igual de mentalizados no?"
"...bueno...."

El viento que entraba por la ventana del coche velozmente, es como si estuviese
reuniendo a unos viejos amigos. Kyo se relajo, y sonrió.
"Hey,Benimaru,Daimon"
"Que?"
"Puede ser mal momento para preguntarlo pero...os importa?"
"Que diablos?, dispara"
"En este siguiente torneo, no se quien lo esta llevando exactamente, pero detrás, el que
esta moviendo los hilos seguro que es ese cabrón"

Hasta ahora, Benimaru y Daimon le habían temido como adversario, y las palabras de Kyo que les hacia pensar lo que seguro les esperaba no lograron asustarles ni desanimarles.
"Bueno, en realidad ya me lo imaginaba"
Le dijo a Kyo Benimaru con una sonrisa fría.
"Cuanto mas fuerte el enemigo, mas ganas me entran"
Daimon cruzo unos brazos enormes como dos gigantes ramas de árbol y sonrió.
"Nos lo dices un poco tarde no?"
"Si, cierto"
"Callaos!"
Kyo cerro los ojos como para que le dejasen en paz.
El joven volvió a su sitio, con sus compañeros y posiblemente le esperaba el enemigo de
siempre.
Para que Kyo "ardiera", eso era mas que suficiente

Era una noche de clima agradable tirando a cálido, en alguna ocasión se levantaba una fuerte brisa, pero eso no era incómodo en absoluto sino más bien lo contrario.
Chizuru Kagura se despertó, no por el calor, sino por un sexto sentido.
"....."
El resplandor de la luna llena entraba por la ventana de la habitación, dejando
una ligera luz azul en la pared.
Y, en esa luz había la sombra de una persona.
"¡¿Quién anda ahí?!"
A Chizuru no le hacía falta ver el rostro, ni siquiera escuchar la voz de la
persona que se encontraba ahí, podía sentirlo.
De la sombra salió una voz.
"....Parece mentira, Kagura"
Sonrió con una sonrisa fría.
"Tú, precisamente...."
Chizuru se incorporó en la cama.
"Sigues sin poder usar tus llamas, verdad?"
"No me importa en absoluto"
Delante de semejante demostración de seguridad en si mismo, Chizuru no
supo qué responder.
Aún habiendo perdido sus llamas purpuras, su fuerza no había cambiado en
absoluto.
Teniendo en cuenta que se había abierto paso hasta la habitación de Chizuru
derrotando a los guardaespaldas de ésta, uno se daba cuenta de su fuerza.
Chizuru se dio cuenta de que a pesar de que ella no era nada sin la fuerza del
Espejo, él era muy distinto.
Chizuru apretó ligeramente los dientes.
"He venido pensando que habías recuperado tus poderes, pero, tal y como
pensaba, sino acabo con ése niñato no habrá nada que hacer


El hombre dio la espalda e hizo por irse, Chizuru alargó el brazo y dijo.
"Espera, Yagami! Eso puede ser una buena oportunidad para ti"
"....Que puede serlo?"
"Las llamas de Yagami, usadas durante estos 660 años, han estado mezcladas con el poder de Orochi. Pero, ahora que has perdido tus llamas, ahora....ahora la familia Yagami puede huir de su maldición Orochi."
"No me importa"
El hombre contestó a Chizuru y mostró una sonrisa.
"....Yo soy yo. ¿Familia Yagami? No me hagas reír"
"Yagami....."
Chizuru trato de detener a Yagami, pero en aquél momento se dió cuenta de que le faltaban fuerzas. Las llamas de la familia Yagami. Ésas llamas estaban manchadas con el poder de Orochi, si Yagami quería librarse de Orochi para siempre, también tenía que decir adiós a sus llamas.
El dilema no dejaba de atormentar a Chizuru.
"Tranquila, dentro de nada tu Espejo volverá"
Chizuru seguia en silencio, y el hombre dijo mientras se iba.
"....y lo mejor, lo siguiente es la desaparición de la Espada"
"No lo hagas! Yagami!"
Chizuru salió de la cama, pero era demasiado tarde, el hombre había
desaparecido, sólo quedaba el resplandor de la luna llena.


Cada vez que un camión pasaba por ese puente peatonal, el suelo temblaba
ligeramente.
El puente había aguantado vientos y lluvias durante años, la pintura estaba rasgada e incluso tenía óxido en numerosos lugares. Aquel puente parecía un enorme cadáver de un animal gigante.
Yagami Iori caminaba por ese puente y de pronto paró su paso y miró la luna.
"......"
El cigarrillo que tenía en la mano izquierda ya se había consumido casi por
completo, entonces Iori dijo.
"....qué quiere de mi un muerto a estas alturas?"
Iori se mantuvo frío, parado en aquel puente, donde se veía una sombra.
"Has venido a decirme cuanto me odias? o a que pedirme que te mate de nuevo?"
A esas palabras la sombra respondió.
"Menudo saludo, Yagami.....después de tanto tiempo sin vernos...."
"Mira el cielo de nuevo. Te lo dije verdad? "Nos veremos de nuevo en una
noche de luna llena""
"......"

Iori no mostro ningún cambio de actitud frente a las dos mujeres. De las sombras empezaron a salir dos mujeres de hermosa figura. Iori tiró la colilla yentornó los ojos.
".... qué es lo que queréis?"
"Tenemos que querer algo en especial?"
Vice, con su pelo rojo, contestó mientras se estiraba. Con su ropa negra
ajustada, parecía tal cual una serpiente amenazando a su víctima.
"En principio no pensábamos salir"
"Entonces porqué estáis aquí?
"Bueno...por qué será?......Puede que, aunque no lo parecéis en realidad no
tenéis ganas de ir"
Con una cara fría, contestó Mature, mientras sujetaba un parche de ojo.
" Qué quieres decir?"
"Kagura, luego Yagami, hasta tú has sido vencido por ése tal Ash Crimson o
como se llame"
"Y encima esos tíos extraños van tras el poder de Orochi."
"Ni idea, no me interesa"
"Bueno,ya sabemos como eres, no te interesa ni siquiera lo que pueda pasarte
a ti mismo"
"Pero nosotras no somos como tú"
"No podemos estarnos calladas mientras nos quitan el poder de Orochi"
"Por eso hemos venido"
Vice y Mature, se suponía que Iori las había matado con sus manos.
Iori metió las manos en los bolsillos y murmuró.
"Me parece bien que queráis limpiar el nombre de Kagura....pero,que podéis
hacer?"
"Hmmmm...bueno, quien sabe? pero, creo que todos podemos ayudarnos
mutuamente, no es así?"
"Tú vas detras de ese niñato, nosotras de esos tíos....Cualquiera de nosotros, si
gana el torneo, acabará enfrentándose a quién le interesa"
"Como siempre, vais a lo vuestro, pero yo paso"
"En efecto, pero te guste o no es un atajo... Además, quieras o no hacen falta
compañeros de equipo,
“¿no es así, Yagami?"
"Hmmmm...."
Iori, mostrando su falta de interés, comenzó a caminar. Pasó entre Vice y Mature y siguió su camino por aquel puente. Mientras se iba dijo su últimapalabra.
"Os aviso, como no me sirváis de ayuda....."
"Vosotras no pintais nada" verdad?... Ya hemos oído eso en anteriores
ocasiones"
Vice sonrió.
"Estamos ansiosas de ver tu fuerza sin tus llamas. Sabemos que no nos
decepcionarás"
"Ni habiendo muerto has perdido tu manera de elogiar..."
Iori llegó al final del puente y se giró, pero ya no estaban las dos mujeres.

"....."
Iori sacó otro cigarrillo y lo encendió con su viejo mechero.
En aquella oscuridad el fino hilo de humo del cigarrillo parecía llegar hasta la
luna llena.

La brisa agitaba el césped.
La residencia de la familia de la que había heredado sus viejas tradiciones y deberes se disolvía ahora bajo una naturaleza que borraba los pocos signos que quedaban de su gloria pasada.
Tan sólo la fuente y los pilares resecos de piedra que aún quedan son una pequeña
reminiscencia de sus días de esplendor, belleza y lujo.
Elisabeth, que contemplaba la estatua de una diosa, giró sus serios ojos hacia el cielo
azul.
¿Cuánto tiempo había pasado desde que el gran incendio que redujera a cenizas la
gigantesca mansión?
Pensándolo ahora, ese incendio debió ser una señal de algo... o de alguien.
Pero no importa lo que fue, los dos herederos vivieron desde ése día como verdaderos
hermano y hermana.
Pero él ya no estaba.
Vestida de negro, con varias fotos tomadas en ese mismo patio en las manos tiempo
atrás, había estado ahí de pie durante unas horas.
"Señora..."
"Lo sé... Sólo un poco más..."
Respondiendo a la voz del anciano que vino a buscarla, la mujer asintió con la cabeza
ligeramente.
El viento azotó de nuevo el patio e hizo volar el velo que tapaba la cara de Elisabeth.
Con las manos en los bolsillos del pantalón, el constante movimiento de su rodilla
denotaba la irritación del hombre de Shangai.
Después de tomarse su café expreso de un sólo trago Shen se mostró aún más turbado

-"3 segundos...." fue el pensamiento de Duo Lon, y después de esos 3 segundos, Shen
levantó la mano para ir a golpear la mesa.
"Detenté."
Justo en el instante antes de que la mesa fuera partida en dos la mano de Duo Lon paró el golpe de Shen. Este miró furioso a su compañero de piso, pero luego murmuró algo y dejó ir su mano.
Montmartre, agitada por artistas y turistas, brillaba con la luz de principios de verano.
Incluso las sombras de los hombres que circulaban por Promanadme parecían arte, de
alguna manera.
Duo Lon, aún sabiendo las oscuras historias que se escondían tras ellos y que no
encajaban para nada en el lugar, no pudo evitar una reírse levemente.
Oyéndolo reír, Shen se giró hacía Duo Lon.
-"¿...Qué es tan divertido?"
-"Nada... Sólo me hacia gracia cuanto contrastamos tu y yo en ésta ciudad."
-"Yo no quería esto."
De repente Shen, tiró su taza con el dedo y empezó a perder la paciencia.
-"¿...De que va esto?"
-"¿El qué?"
-"¡Mira! ¡Venimos desde muy lejos para contestar a su llamada y encima tenemos que
esperar!"
-"Es verdad."
-"Dos somos de un sitio y el otro de otro ¡así que tendría que haber sido ella la que viniera
a Shangai a buscarnos! ¿Me puedes decir porqué hemos venido nosotros a Francia?"
-"Porqué fuimos reclamados."
Duo Lon respondió de forma indiferente aunque, por supuesto, sabía que esa respuesta
no iba a satisfacer a Shen.
-"Mira..."
-"Parece que ya está aquí."
Al escuchar las palabras de Duo Lon, Shen se volvió rápidamente.
-"Siento el retraso."
Elisabeth bajó la cabeza y se disculpó educadamente con los hombres, pero nada dijo
acerca de la razón de su retraso.
Shen se levantó golpeando su silla, observó el riguroso luto que vestía Elisabeth de pies a
cabeza y se encogió de hombres de forma exagerada.
-"Vas muy mona para ir con retraso, no? Y con el peinado muy bien arreglado.
¿Vienes de una fiesta o qué?"
El sarcasmo de Shen fue algo insultante, pero Elisabeth le ignoró completamente y le
entregó un sobre blanco.
"¿...Las invitaciones?"
"Por supuesto."
"Nosotros."
"La cosa es así; el primer día de combates nos reuniremos una hora antes delante del
estadio."
"¿Eh...?"
Las pocas palabras de Elisabeth hicieron que Shen arqueara las cejas.

-"...Oye un momento... ¡Hemos dado media vuelta al mundo por tu llamada! ¿Y ahora qué? ¿Después de estar esperándote todo este rato todo esto es lo que tienes que decir?¡Podríamos haber hablado esto por teléfono!"
-"Basta, Shen."
Al ver a Shen quejarse delante de Elisabeth, Duo Lon intervino.
"...En cualquier caso, nuestra primera lucha es aquí, en Francia. Así que en realidad tan
sólo hemos venido algo antes."
-"¿Así que ahora tenemos que hacer de turistas? ¡Tú mismo has dicho que no encajamos
en esta ciudad!"
-"Si no quieres pasear siempre puedes ir a comer cangrejos..."
-"¡Tú...!"
-"Es una broma."
Mientras los dos hombres discutían, Elizabeth ya había abandonado su sitio.
La espalda de Elisabeth, que caminaba que su habitual grandeza, parecía pequeña.
Viendo la figura de Shen murmuró por lo bajo.
-"¿Qué tiene ésta con Ash?"
-"No conozco los detalles. Pero parece que tienen algún tipo de parentesco... Pero parece
haber aún algo más."
-"Así que nos pide nuestra colaboración para formar equipo pero no nos suelta ni una sola
palabra sobre esto ¿no?"
-"¿Prefieres ponernos a buscar algún otro miembro?"
Duo Lon silenció a Shen.
-"Estaría bien saber si tienes alguien mente que vaya a aceptar a estas alturas."
-"Es cierto que tengo más enemigos que amigos..."
Shen soltó una risa burlona.
-"...Además si quiero que el capullo de Ash nos pague la cuenta"
-"¿De que hablas?"
-"De los cangrejos. ¡Cuando el torneo termine, nos zamparemos una buena comilona
entre los tres!"
The King of Fighters, el enorme torneo de artes marciales que da la vuelta al mundo empieza a mediados de verano. Mientras que los resultados saldrán en otoño. Algo temprano para la temporada de cangrejos, pero suficientemente buena para el impaciente Shen.
Shen, más relajado, apoyó su mano sobre el hombro de Duo Lon.
-"...Bueno, pues vayamos allá."
-"¿Sabes dónde ir?."
-"Ni idea."
-"Me lo imaginaba."
Duo Lon dibujó mentalmente el mapa de París y empezó a andar hacia la estación de metro más próxima. Aún en territorio desconocido, memorizar perfectamente los mapas de los sitios para poderse mover bien donde fuera era ya una costumbre que aprendió en su formación como asesino.
-"¿A dónde te diriges?"
-"Al distrito 13."
Sea porqué fue la ciudad que manejó colonias como Vietnam o la antigua Indo China del Asia Oriental, París es la ciudad europea con más colonias en Asia y el distrito 13 es unade los China Town más grandes del mundo. Seguramente allí podrán encontrar platos y bebidas con los que deleitar sus paladares y, lo que es más importante, relajarse.

Por un momento Shen se detuvo y le miró a los ojos.
-"¿...Qué?"
-"Nada."
Shen se volvió rápidamente y esbozó una sarcástica sonrisa.
-"Cada uno tiene sus propios motivos para luchar...eh?"
-"Ahora te das cuenta de eso."
-"Sí... Los asuntos de otros no me conciernen."
-"Vamos."
Junto con Shen, Duo Lon desapareció en la oscuridad. Las frías sombras les eran más
cómodas que el calor del sol del la Ciudad de las Luces.
Cuando empezó a oscurecer el viento sopló con más violencia.
Sólo los blancos muros de la catedral del Sacre Coeur, teñidos ahora de naranja por los
reflejos del atardecer, estaban iluminados luces blancas. Había ya menos turistas que por
la tarde, pero aún quedaban algunos.
-"Siento la presencia del chico."
Elisabeth le habló a su mayordomo ya mayor que permanecía a su lado.
-"Hay algo más... Pero estoy segura que ha venido."
-"Señora."
-"No te preocupes."
Sonriendo a su mayordomo, Elisabeth tomó su sombrero negro que él le sostenía.
-"No estoy desfalleciendo. Lo que pasó hoy fue sólo para prepararme."
-"¿Prepararos?"
-"Si ese chico ha olvidado la misión... Entonces debo estar preparada cuando llegue el
momento."
-"Señora, eso podría ser demasiado...!"
-"Estaré bien."
Un haz de luz blanca emanó del puño de Elisabeth. Repeliendo la oscuridad de su
alrededor, la luz iluminó ligeramente su rostro.
-"Mientras la luz blanca ilumine mi corazón, estaré bien."

En el Este de South Town, Estados Unidos, había un bar llamado Pao Pao Cafe.
Ése sitio era la meca para los luchadores que querían lanzarse a la fama.
South Town era ya famoso en el mundo entero por ser dónde se celebraba amenudo el campeonato en el que se reunían los luchadores mas poderosos del mundo, "The King Of Fighters".
Pao Pao Cafe organizaba todas las noches eventos excitantes, peleas entre
luchadores que querían demostrar su valía.
En el local se escuchaba una música rítmica, la gente desbordaba risas y
felicidad.
Todavía era por la tarde y la luz del bar iluminaba el interior. Los cliente se Empezaban a amontonarse esperando el show nocturno. Ante esta nostálgica sensación, la sensación de nervios en el estómago, Joe Higashi empezó a hacer un juego de piernas. En la terraza de la segunda planta, Joe no estaba de buen humor.
No es que estuviese de mal humor, es que Joe estaba realmente enfadado.
-"Desde luego, los dos hermanitos siempre quieren llamar la atención."
Joe miró el techo con las manos dentro de la chaqueta.
-"Estos dos no saben la que se juegan haciendo esperar a la superestrella
mundial Joe Higashi."
-"¿Quién es una superestrella?"
Dijo el propietario del local, Richard, mientras traía una gran jarra de cerveza.
Había muchos camareros para hacerlo, pero Richard en persona le llevó a Joe la cerveza, precisamente por tratarse de él. Delante de Joe, una gran jarra de cerveza y carne de cocodrilo frita. Richard se rió.
-"Que Terry se retrase es algo normal y lo sabemos, pero de Andy no me lo
esperaba ¿que habrá sucedido?"


-"Seguro que nada que sirva de excusa."
Joe levantó la gran jarra de cerveza y la terminó de un tirón.
Ésta vez el gran campeón de Muay Thai Joe Higashi, Terry, la gran leyenda de South Town, y su hermano Andy Bogard, formarían equipo en la nueva edicion de The King Of Fighters.
Por motivos de peso Andy y Joe habían dejado solo a Terry en anteriores ediciones, en las que Terry se vió obligado a hacer equipo con otros luchadores. Ésta vez era especial, hacía mucho tiempo que no se juntaban.
Pero con todo y con eso, Terry y Andy se estaban retrasando en la hora en la
que habían quedado.
Joe llevaba ya esperando más de media hora. Ésa era la razón más que
suficiente para enfadar a Joe.
Joe susurró mientras cortaba salvajemente la carne y se la llevaba a la boca.
-"Esos hermanos melenitas rubitos... Cómo no vengan en 30 minutos..."
-"¡Ey, han llegado!"
-"¿Qué?"
Joe miró por encima de Richard, el cual estaba dando golpecitos en la espalda
a Joe para llamar su atención y pudo ver a Andy que venía con su novia... Mai
Shiranui.
-"¡Ah! ¡Ey! ¡Allí está Joe!"
Mai saludó con la mano a Joe y Richard desde abajo sonriendo.
-"¡Esos dos pasando de todo y encima enrollándose...!"
Joe cerró los dientes al ver a Mai pegada al pecho de Andy.
-"¿Eh, qué te pasa Joe? ¿Has dicho algo?"
-"He dicho que siempre se está creyendo algo este Andy, yendo por ahí como
si fuese lo más..."
-"Yo no creo que se crea nada pero... Oye Joe ¿no estarás celoso de Andy?"
-"¡Nadie ha dicho eso!"
Joe con la cara roja, y no por el alcohol, golpeó la mesa. Andy y Mai subieron a
encontrarse con Joe.
-"¡Hola, Joe!"
-"Siiii"
-"Perdón por llegar tarde. El avión se ha retrasado."
Sin saber lo enfadado que estaba Joe, Andy estiró su mano para dársela a Joe
sonriendo.
-"***, si el avión se retrasó entonces no es culpa suya...."
Al oír la razón de la tardanza, Joe se relajó un poco. Pero en lugar de darle la
mano, le ofreció un trozo de carne de cocodrilo que tenía en el tenedor.
-"Y... ¿A Terry que le ha pasado?"
-"¿Mi hermano? Véte a saber... No ha llegado aún, eh?... Vaya, pues no está
mal la carne de cocodrilo."

Andy pidió una cerveza mientras comía la carne de cocodrilo al lado de Joe.
-"Yo también quiero una cerveza, Richard!"
Dijo Mai sonriendo, levantando la mano, mientras arrimaba su silla a la de
Andy.
-"OK !dos cervezas marchando¡"
-"Ah, y ve preparándonos el local para celebrar nuestra victoria"
-"¿Celebrar qué victoria?"
Preguntó Joe sorprendido al escuchar a Mai decir eso.
-"...Ey, Mai ¿tú también participas esta vez?"
-"Je je! exacto!"
Dijo Mai mientras sacaba de su bolso un sobre blanco.
-"Digamos que si yo no participo este torneo no es lo mismo. Por ese motivo, el
premio nos lo llevaremos las chicas luchadoras esta vez. ¡Se siente!"
-"¿Qué te parece Joe? Desde Japón viene con esta cantinela."
Andy observó cortado como Mai se reía tapándose la boca con su abanico. Joe
terminó su cerveza y se levantó.
-"Bueno, si quieres soñar eres libre. Pero te guste o no, el que ganará este
torneo es éste Joe Higashi y los dos hermanitos. Eso lo sabemos todos."
-"Ha pasado tanto tiempo desde el último torneo que parece que estáis todos
con ganas, eh?"
Dijo Richard mientras dejaba las cervezas en la mesa sonriendo.
-"...Mirad, "El lobo legendario" que todos estábais esperando parece que ha
llegado."
Richard señaló detrás de él, dejando ver a Terry subiendo por las escaleras. A
su lado estaba Mary. Joe los vió y frunció el ceño.
-"¡Ey, estáis todos!"
Dijo Terry mientras se levantaba la visera de la gorra y guiñaba un ojo.
-"¿Qué ha pasado? Hermano, has llegado muy tarde."
-"Llegué pronto a la estación de South Town, pero el viaje fue largo, y me quedé dormido en la sala de espera de la estación. Y cuando he despertado, al ver la hora qué era, he llamado a Mary con las prisas y me ha traído rápidamente en su Harley".
Al lado de Terry, Mary se encogió de hombros.
-"Me gustaría que pensases más en los demas, la verdad. Me llamas después
de mucho tiempo, y es para que te lleve con prisas al Pao Pao Cafe..."
-"Perdón, perdón, de verdad te lo agradezco, Mary."
-" ¿"Perdón, perdón"? ¿estás de broma???"
Dijo Joe mientras se levantaba de la silla casi tirándola y metiéndose en la
conversación de Terry y Mary.
Joe señaló a Terry con el dedo y dijo gritando.

-"¡Terry! si has hecho algo mal, antes que a Mary, tienes que disculparte y
bajar la cabeza ante otra persona no?!"
-"¡¿EH?!"
-"¿...Qué te sucede Joe? ¿Por qué estás tan enfadado?"
-"Eso no importa ¡te digo que te disculpes! ¡Para empezar, he esperado más de
media hora!"
-"Ahora que lo pienso, me han llegado rumores pero..."
Dijo Andy ignorando por completo el numerito que Joe estaba montando.
-"....En este torneo parece que Raiden y Hwa Jai se unirán a Kim para
participar."
-"Encima de Raiden, Hwa Jai... lo tenía oído de rumores pero, vamos, no creo
que Kim pretenda meterlos en vereda."
-"Bueno, mientras participen luchadores fuertes no problem. Mientras se puedan hacer grandes combates yo sin quejas".
-"Algunos no cambian, eh, Terry?"
Terry miró a Joe, el cual estaba cerrando los puños, y le dijo.
-"¿...No estarás nervioso porque sale Hwa? Ahora que lo pienso, él tiene que
ver algo contigo, no? ¿Joe?"
-"¡Que demonios! ¡¿Quien está nervioso?!"
-"Bueno, pues tú. Desde hace un rato ya que estás muy enfadado ¿o no?"
-"¡De...déjame en paz, maldito niñato!"
Aunque no había mala intención en las palabras de Terry, Joe se enfadó con él
y volcó la mesa de repente.-
-"Eh! Hey! ¿Qué sucede de repente, Joe? ¿Ya estas borracho?"
-"¡Cállate! ¡Primero te recordaré lo que es ser líder y después te machacaré!"
-"No sé bien de que hablas pero...OK! Antes del torneo veamos cuán fuerte te
has hecho!"
-"¡No te rías como sinó pasase nada!"
Joe y Terry bajaron al primer piso. Al ver a estos dos famosos de la lucha
dispuestos a pelear en
Pao Pao Cafe después de tanto tiempo, el público estalló en voces.
-"Desde luego, los dos hermanitos, y luego el otro enrollándose con la otra...!"-"¿Que has dicho Joe? ¡El público esta haciendo tanto ruido que no oigo nada!"-"¡No he dicho nada!"
Terry empezó el juego de piernas, Joe se quitó la chaqueta y la lanzó.
La sonrisa era exactamente la misma, pero la sensación de haberse hecho más
fuerte, la notaba incluso Joe.
-"...Bueno, aunque seamos amigos, éstas cosas hay que saberlas: ¡quién es el
más fuerte de los dos!"
A Joe se le pasó la ligera borrachera cuando le subió por el cuerpo un calor repentino. Cuando se tiene enfrente a un enemigo tan poderoso, la cabeza se llena sólo de lucha, lucha y más lucha.
Al final, Joe ya era feliz con luchar con alguien fuerte. En ese sentido, era un
hombre simple.
-"¡Allá voy, Joe!"

Terry avanzó un paso hacía Joe, que sintió a un Terry mucho más fuerte y
tembló por un momento.
-"¡¡¡Vamoooooos!!!"
Joe no dió ni un paso atrás. Al contrario, avanzó y lanzó un puñetazo.
-"¡Siéntate y observa! ¡¡¡El que se lleve la victoria será este Joe Higashi!!!”

Aquel día, la hija de Takuma Sakazaki le dio una gran sorpresa a su padre.
"Yuri, ¿qué te has hecho?"
"¿Eh?"
Dijo Yuri mientras se ataba el cinturón, mirando a la cara a su padre, al que le
temblaba la voz.
"¿Qué pasa padre?"
"¿Cómo que qué pasa? ¡Ese pelo! ¿¡Qué significa eso!?"
"Ah, ¿esto?"
El largo pelo de Yuri que le llegaba hasta la mitad de la espalda se había
convertido en un peinado corto.
Yuri se tocó el pelo y sonrió.
"Ví que habían abierto una nueva peluquería en la calle donde salgo a correr,
así que pensé: "A ver que tal cortan el pelo" y entré...
"¡No te estoy preguntando por eso!"
Enfadado porque creía que Yuri se burlaba de él, Takuma subió el tono.
En el Dojo estaban, a parte de Takuma, Yuri y Ryo, unos cuantos practicantes de cinturón blanco. Todos miraban a Takuma ante tal repentino enfado inmersos en la incomprensión.
Ryo se levantó del suelo y caminó hacia Takuma. El que era el hermano mayor de Yuri e hijo de Takuma, sabía el motivo del enfado de Takuma, cómo tambien sabía la vergüenza que iba a pasar viendo como su padre hacia el ridí*** frente a los demás alumnos.
"Oye, padre, esto..."
"¡Tú te callas! ¡Oye, Yuri! Lo que quiero decir es..."
"¿Qué diablos sucede? ¿Qué es lo que ha pasado aquí?"
Dijo Robert Garcia que acababa de entrar con el traje de karate doblado y
colgando en su espalda.
"Oh, Yuri-chan, ¿te has cortado el pelo?"
"Ah, sí."
"¡Oh! El pelo corto también te sienta bien, estás muy guapa."
"Ah, Robert no digas esas cosas que me sonrojo."


Robert y Yuri se miraron y se rieron.
"Eso es, ¿por qué no haces de oponente hoy, Yuri-chan?"
"Vale. Pero no te dejes vencer como siempre ¿eh?"
"¡Claro que no, eres tan fuerte que no hace falta dejarte ganar!"
"Eh.. Robert"
A causa de la entrada y la repentina conversación de Robert, Takuma se sentía
como un idiota. Su enfado subía más y más y dijo a Robert:
"Si quieres un oponente yo puedo servirte."
"¿Eh? ¿Usted, padre?"
"No me llames padre, bueno, eso es lo de menos, Yuri no sirve de oponente
para ti."
"¡Un momento papá!"
"¡Espera!"
Ryo mandó callar a Yuri que parecía enojada por las palabras de su padre.
"Déjalo estar por ahora, Yuri."
"¡Pero es que siempre hace lo que quiere! Además antes..."
"Bueno, yo no es que no entienda lo que siente padre..."
"¿Eh?"
Yuri se sorprendió con las palabras de Ryo.
"Lo que quiero decir es que, ahora están los alumnos, ahórrate broncas
inútiles."
Robert se ató el cinturón de karate y se colocó frente a Takuma mientras guiñaba un ojo a Ryo. Seguramente el incauto de Robert no sabía el mal humor que Takuma tenía.
Ryo comenzó a practicar con Yuri ligeramente.
"¡Desde luego! ¿Por qué los hombres de la família Sakazaki son todos así?"
Dijo Yuri mientras movía la pajita en el vaso de su café helado.
"Por ejemplo, mi hermano, "¿Te has cortado el pelo? Vaya...", y sin decirme siquiera si me sienta bien o mal. ¡Luego mi padre se comporta de tal forma queno se sabe que le pasa! ¡Deberían aprender de ti, Robert!"
"Bueno, bueno..."
Cuando acabaron el entrenamiento, Yuri y Robert fueron a la terraza de un
café. Yuri dijo que iba de compras, y siempre le tocaba a Robert acompañarla.
"Se dice que Takuma que es el vivo espíritu del Karate, y es tu padre, ¿no lo
conoces bien aún o qué?"
"¿Eh? ¿Qué quieres decir?"
"Bueno... Son cosas de familia y no me gustaría entrometerme. Pregúntale a
Ryo."
Robert dejó su taza de cappuccino en la mesa. Yuri no entendía a su padre, ni a
Ryo, y ahora ni siquiera a Robert.

"...pero, bueno a lo mejor el maestro no quiere que tú, su hija, siga practicando
karate."
"¿Eh? ¿Quiere que lo deje?"
"Pues eso, tú estudiaste Karate para autodefensa, pero ahora empiezas a saliren torneos de importancia y la cosa ha cambiado, puede que no sea eso lo que Takuma quiera para su hija."
Yuri calló pensando lo que acababa de decir Robert. Realmente Yuri comenzó l karate como defensa personal, pero llegó participar en muchas ocasiones enThe King of Fighters. Se suponía que quería aprender a protegerse y ahora utilizaba el karate como método de ataque en torneos. Lo que pensaba Takuma empezó a tener lógica para Yuri.
"¡Heeeey!"
Yuri miró y vió a su hermano, que venía con una chaqueta de cuero y
sacudiendo la mano.
"¡...Tenemos que irnos ya, Yuri!"
"Hermano..."
"Le he llamado yo antes. Te traía en mi querido coche, y él te llevaba de vuelta
en su cacharro de moto, poco puedes fardar con esa moto creo yo".
Dijo Robert tras acabar su cappuccino riendo.
La moto de Ryo se quedó sin gasolina, así que le tocó ir llevándola arrastras,
pero eso pudo ser algo bueno, ya que dió pie a que los hermanos charlasen.
"...Padre..."
"Sí."
"... padre sólo te conoce con el pelo largo, si lo piensas bien..."
"¿Eh? ¿Es cierto?"
"Así es. La última vez que llevaste el pelo corto fue cuando ibas al instituto,
creo."
"Ah sí, cuando estaba todo el día jugando a volleyball..."
"Sí, y padre no estaba en ésa época. ¿A que no?"
"Ya veo..."
Por fin, Yuri pareció entender a su hermano y a Robert. Cuando Yuri era pequeña Takuma no estaba, y cuando volvió a ver a sus hijos, Yuri ya era mayor.
"Yo creo que simplemente se había acostumbrado a verte con pelo largo durante tanto tiempo que de repente al cambiar a pelo corto se ha pensado que algo había pasado, o que habías cambiado."
"Si, pero a ti no te dice esas cosas."
"Eso es porque yo soy un hombre y tu una chica ¿no? Tú ya tendrías que
empezar pensar en tu futuro."
Yuri nunca había pensado en su futuro. Soltó un largo suspiro.
"No, no suspires. Yo tengo pensado mi futuro, te lo aviso."
"¿Por ejemplo?"
"¡Eso está claro! ¡Llevar el Kyokugenryu al extremo!"

"Sabía que dirías eso."
Yuri no pudo evitar reírse ante esa respuesta tan seria, que era muy típica de
su hermano.
Cruzó los brazos por detrás y comenzó a andar más rápido.
"Ahhh, eres igual que papá, de veras... Empiezo a pensar en King y me da
pena..."
"¿Eh? ¿Has dicho algo Yuri?"
"Naaaada..."
Yuri dejó más atrás aún a Ryo que arrastraba su pesada moto.
"¡Ah! ¡Oye! ¡Yuri!"
"¡Yo vuelvo haciendo un poco de footing!"
"¡De acuerdo, pero no vuelvas muy tarde!"
"¡Ah, y otra cosa!"
Yuri se dió la vuelta corriendo en el sitio.
"¡En el próximo torneo, participo con King y Mai-chan!"
"¡¿Qué?! ¡Oye, espera! ¡No sabía nada de eso!"
"¡Pues que sepas que es así! ¡Tú participa con vuestro equipo de los tres
machos! ¡Os demostraré hasta que punto he crecido mental y físicamente!"
"¡Oye, espera! ¡Yuriiiii!"
Yuri comenzó a correr rápido dejando atrás los gritos de Ryo.
"...Desde luego..."
Ryo suspiró viendo a Yuri que cada vez se perdía más en el horizonte.
Ryo se preocupó de lo que le esperaba en casa cuando Takuma se enterase deque, una vez más, su hija saldría en The King Of Fighters en un equipo contrario al suyo. Seguro que se le ancharía la vena de la frente y gritaría hasta quedarse afónico...

Terminaba un duro día de entrenamiento, Chang Koehan descansaba apoyado en la pared. En ese instante Choi Bounge se le acercó con disimulo. "....hey, Chang." "¿Eh? ¿Qué quieres Choi? Yo hasta que no haya comido no me puedo ni mover...." "Ciertamente el entrenamiento de Kim de hoy ha sido como siempre muy duro.... ¡pero he pensado una forma de escaquearnos de sus entrenamientos!"
"¿SI? ¡¿De verdad, Choi?!"
"¡De verdad de la buena, ésta vez saldrá bien al 100%!"
"¿Qué tienes en mente, eh?"
"Antes que nada mira esto."
Choi le dió a Chang una revista por encima del hombro. La revista era una revista de artes marciales que se publicaba en Korea, y había un artí*** anunciando que se celebraría una nueva edición de The King Of Fighters. Chang miró un rato la página que Choi le mostraba y bostezó. "Ahhh... Entre los equipos que se rumorea que participaran salimos nosotros... ¿Qué más da?, aunque ganemos, Kim no nos dejará en libertad. Si salimos lo único que pasará es que nos cansaremos como siempre...." "¡No es eso, mira esto! Aquí salen los que se rumorea que quieren salir, mira ¡Aquí!"
"¿Ah? ¿Quiénes son estos? Tienen una cara de ser más malos que la peste..."
"No solo es la cara. ¡Tienen un historial delictivo de los buenos!"
"¿Y? ¿¿Qué pasa con estos tipos??"
"¡La cosa es simple! ¡Basta con convencer a Kim de que guie por el camino correcto a estos tipos que son peores que nosotros!" "¡Oh! ¡Choi, eres un genio! ¡Eso es, eso es! ¡¡Sí, eso es!!" Chang había olvidado ya el hambre que tenía y se incorporó vigorosamente. "¡Los malos no descansan! ¡Hay que convencer a Kim de que se encargue de estos tipos!" "¡Exacto, será el nacimiento del nuevo equipo Kim!" Pateando el suelo estrepitosamente, Chang salió corriendo cogiendo en sus brazos a Choi.



En la isla Este de South Town, se acercaba el verano. Aún no era la época de playa, no había nadie nadando ni jugando en el agua en South Beach. En esa playa desierta, se encontraban dos hombres mirándose fijamente. "......" "......" Los dos se acercaron caminando, haciendo ruido con la arena de la desierta playa, en la que apenas podía oírse el sonido de las olas. En ese momento el gigante de más de dos metros habló. "Tal como pensaba ¿tú eres Hwa, no?" "Y tú eres Raiden ¿no?"
Ambos se sorprendieron.
"Hey, ¿tú no habías cortado la conexión con Geese y habías vuelto a tu país?"
"¡Eso es lo que te podría preguntar yo a ti también, Raiden!" Estos dos nunca se llevaron bien. El gigantón llamado Raiden fue uno de los guardaespaldas de Geese en su momento, incluso participó en KOF en una ocasión. Llevaba un traje y corbata pero, con más de dos metros y 210 kilos de peso, imponía igual que cuando está sobre el ring. Por otro lado, y con pinta de turista vistiendo una camisa hawaiana, se encontraba el que fuera campeón de Muay Thai, Hwa Jai. Desde que fue desbancado del título por un japonés, al igual que Raiden, se convirtió en guardaespaldas de Geese, e incluso participó en KOF. Pero, como había dicho Raiden, se suponía que ambos habían cortado cualquier conexión con Geese, y habían vuelto a sus respectivos países. Raiden ahora era un Prowrestler, y Hwa se pasaba el día entrenando, soñando con volver a ser lo que fue en su día. “¿Por que estos dos se habían vuelto a ver en South Town?” Hwa se acercó desafiante a Raiden como si no le tuviese el más mínimo miedo y le dijo: "....Hey hey, ¡¿No serás tú el que me ha llamado?!" "¿Que cojones dices? ¿No eres tú el que me ha llamado aquí? Sea como sea, para nada no voy a quedarme quieto, ¿entendido?"
"¡Me importa un carajo lo que digas!"
"¡Suena divertido viniendo de un payaso que abandonó la lucha!"
Bajo la mascara, Raiden entrecerró los ojos como si advirtiese el peligro. Delante de él, la expresión de Hwa cambió de golpe esbozando una artificial sonrisa. "Oye,Raiden... ¡Esto ya no es el sitio controlado por Geese y dónde se celebraba KOF!" "¡¿Y eso que significa?!" "¡Lo que vengo a decir es que ahora no hay reglas! Como te pases un poco de la raya te mato a patadas, ¿entendido? ¡Albóndiga!"

"¡Alto ahí! ¡Vosotros dos!"
La fuerte voz que se oyó cortó de golpe las ganas de luchar de Raiden y Hwa.
"¿Quién eres?"
Dijeron Hwa y Raiden al unísono a la vez que se giraron.
"No tenéis porqué discutir. El que os ha llamado soy yo."
"¡¡¡¿T-Túuuu?!!!" Hwa se arrimó a Raiden mientras observaba el hombre que se aproximaba a ellos. "....Hey, Raiden, este cabrón, ¿no lo hemos visto antes? ...no será..." "...Sí..." Raiden asintió con la cabeza lentamente. "Este es el maestro koreano Kim, el que sale en todos los KOF. Sale en la televisión y en revistas. ¿No lo has visto nunca?" "¡¿Es ése?! El que se cree algo con su taekwondo, y va por ahí de aliado del bien..." La frase de Hwa se corto a medias. Kim se acercaba a ellos con seguridad, caminando en línea recta. Raiden dijo sin levantar la voz: "Has dicho que tú nos has llamado aquí ¿verdad?"
"En efecto, así es, Don Raiden."
"Bien, ¿y qué quiere de gente como nosotros el maestro Kim?"
"Os lo diré claro."
Kim miró a Raiden y Hwa y dijo de repente. "Lo que quiero de ustedes es que se unan a mí para participar en el siguiente KOF."
"¿Eh? ¿Nosotros...?"
"¡¿Qué nos unamos a un estúpido como tú?!"
"Así es, Don Hwa."
Kim con su polo blanco, cruzó los brazos, y se dió cuenta con qué clase de gente estaba hablando. "Si me lo permiten, ustedes tienen grandes capacidades de lucha." "¡¿Y qué?!" "Con esas capacidades de lucha, ustedes se unieron a Geese para el mal. Participasteis en combates ilegales, malgastasteis vuestros potenciales, ¿no es así?"
"No, nosotros ya no tenemos que ver con el cabrón de Geese, Kim."
"A-así es, nosotros...¿eh? ¿Raiden?"
"¡Sí, nosotros estamos reformados!"
"En ese momento tuve un pálpito"
Kim procedió como si los dos no hubiesen dicho nada. "¡...Yo me encargaré de hacer que ustedes vuelvan a llevar una vida correcta!" "¿Qué? ¿Llevarnos a una vida correcta? No me jodas..."